La verbena de La Paloma 2023

Las verbenas de Madrid: por qué se llaman así, por qué son mágicas y por qué nos gustan tanto

De pronto llegó agosto. Ni nos dimos cuenta, pero aquí estamos de nuevo, una vuelta al sol después, en el corazón de las verbenas de Madrid, en los días en los que nuestra ciudad se vuelve deliciosa, castiza y tropical. De San Cayetano a La Paloma, pasando por San Lorenzo: los Santos de Agosto, las noches de verbena.

En estos días este chucho callejero ha querido hacerse las preguntas que tantos se hicieron antes que él. ¿Por qué las fiestas de Madrid se llaman verbenas? ¿Por qué son mágicas? ¿Y por qué nos gustan tanto?

Acudí a la fuente primera, a la más oficial, disculpen la decepción. Sí, me fui al diccionario de la RAE y cuál no sería mi sorpresa cuando hallé el significado que buscaba en una triste segunda acepción, vestida eso sí, con la rara belleza de la pulcritud, desnuda de cualquier artificio innecesario:

Verbena: f. Fiesta popular con baile que se celebra por la noche, al aire libre y, normalmente, con motivo de alguna festividad.

Comprenderán ustedes, querid@s lectores, que era menester detenerse entonces en la primera acepción que ofrecía la Real Academia y averiguar si existía alguna relación con la segunda. Para los académicos que marcan la pauta de nuestro idioma, la verbena es, en primer lugar, una planta herbácea, de hojas ásperas, flores de varios colores y, parece ser, bastante común en España.

Entre escombreras y prados pisoteados, la ‘curalotodo’ verbena

La verbena (Verbena Officinalis) es una planta de hoja perenne, cuyos tallos alcanzan entre 30 y 60 centímetros de altura. Sus flores se disponen en espigas de tonalidades definidas entre el rosa pálido y el lila rosado. Esta herbácea, que crece en los bordes de caminos, prados pisoteados, taludes, escombreras (…) -como se explayan poéticamente en el portal Asturnatura-, es muy frecuente en Europa, Asia o África, floreciendo, como las fiestas populares de nuestras latitudes mediterráneas, entre junio y septiembre.

Planta de la Verbena Officinalis
Fuente: Wikipedia. Autor: AnRo0002. Licencia CCO

Ha sido conocida con muchos nombres, como ‘curalotodo’, ‘yerba sagrada’ o ‘hierba de San Juan’, aludiendo a sus propiedades medicinales, al comienzo de su recogida con la llegada del verano, coincidiendo con la festividad de San Juan (24 de junio), o a su empleo en todo tipo de rituales.

La verbena se recoge en verano, cuando está en flor. Según nos cuentan los amigos de Botanical-online, que de estas cosas saben un rato, se toma toda la parte externa de la planta, se deja secar a la sombra y se guarda en bolsas de tela, a salvo del polvo y la humedad.

Su uso medicinal la acompaña desde su propia denominación científica. El epíteto latinoOfficinalis’ alude precisamente a sus propiedades terapéuticas, tan exploradas a lo largo de la historia que llevaron a conocerla popularhente como ‘curalotodo’.

La Verbena Officinalis ha sido utilizada especialmente para el tratamiento del dolor, en forma de cataplasma o a través de infusiones, aplicándose sobre la espalda, para enfrentar dolores de ciática y lumbago, así como para tratar esguinces y desgarros musculares. Pero es que además se le atribuyen efectos favorables ante infecciones respiratorias y para proteger la salud del hígado, así como para aumentar la producción de leche en el caso de las mujeres lactantes y como antídoto frente a la, esa sí que es pálida, resaca. Ojito con la verbena si estás embarazada, por cierto, pues parece ser que puede provocar abortos. Para profundizar en sus propiedades medicinales, te recomiendo hoy un vistazo por aquí.

La verbena: para atraer el amor y la suerte

La planta de la verbena era ya conocida por celtas, griegos y romanos en la Antigüedad. Etimológicamente procede del latín verbena, que se derivaría de la voz verber, que significa látigo, correa o azote. Según el DECEL (Diccionario Etimológico Castellano En Línea), esto es así porque esta planta era utilizada con tal fin por parte de sacerdotes romanos de forma ritual. También con fines ceremoniales, se usaba para la elaboración de coronas y ramos.

Sobre sus virtudes mágicas a la verbena se le atribuye la prevención del mal, así como la atracción de la prosperidad, la fertilidad de las cosechas o el amor. Azucena San Pedro, experta en plantas medicinales y aromáticas, explica en este artículo que la verbena se ha utilizado para alejar envidias, odios y pesadillas, colocando una pequeña bolsita con sus hojas bajo la almohada. Y se ha utilizado, por supuesto, para la preparación de ‘filtros de amor‘, con los que atraer a la persona amada. Desde aquí el camino al encumbramiento de la verbena como planta mágica y legendaria es tan liviano como flotar por las calles de La Latina en mitad de la verbena de La Paloma. 

Cartel Fiestas de Agosto en Madrid 2023
Cartel oficial de las verbenas de agosto 2023

Contaba hace unos años Alfred López, en su blog “Ya está el listo que todo lo sabe”, alojado en el diario 20 minutos, que la planta de la verbena era utilizada muy asiduamente durante la Edad Media en ceremonias y rituales paganos celebrados durante la noche para atraer el amor o la fertilidad. Sería a partir del siglo XIX cuando pasó a relacionarse a la plantita directamente con todos los actos celebrados bajo el manto de la noche.

En el portal Revive Madrid cuentan con un interesante artículo dedicado a las verbenas. En su texto afirman que la verbena florecía en abundancia en los campos madrileños durante la primavera, y que en el Siglo de Oro, los mozos acudían en su búsqueda para intentar asegurarse el corazón de sus amadas. El mejor momento para recogerla era la noche de San Juan, la festividad con la que la religión católica se apropió de la ancestral celebración del solsticio de verano. Hasta tal punto se hizo popular esta tradición que se acuñó la expresión ‘coger la verbena’ para referirse al hecho de madrugar mucho para irse a pasear, como recoge la propia RAE. Acabaría, igualmente, por nombrar a la gran fiesta popular que se celebraba con motivo del solsticio de verano y la recogida de nuestra planta favorita.

Todas las teorías coinciden en que las propiedades de la verbena, tanto las mágicas como las medicinales, se potenciaban cuando la planta era recogida de madrugada, antes del alba. Y en que debía recogerse en su esplendor, recién florecida de rosa pálido. Por eso la gente salía a buscarla en las embriagadoras noches de verano, planeando tocar después con la ramita, descuidadamente, a la persona amada, con el sueño de atraerla hacia sus brazos. El mejor momento era, de nuevo, la noche, en las fiestas que en el estío se celebran en cada pueblo, Madrid incluido, con baile nocturno, cuando bajan los calores y no puede faltar, en la solapa, la ramita de verbena. Y tan así fueron las cosas que nuestras queridas fiestas populares y nocturnas acabaron tomando el nombre de la pequeña planta que crece entre escombreras y prados pisoteados con la que mozos adornaban su atuendos y llamaban al amor: la verbena.

¡Que vivan las verbenas de Madrid! ¡Guau, guau!

.

El Perro Paco

¡Sigue al Perro Paco!

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *